A casi dos años de iniciado este gobierno se ha dicho todo sobre el estilo de comunicar del presidente López Obrador. No es ningún secreto que gobierna más a través de la palabra que de los actos; dice mucho y hace poco y gran parte de lo que dice son dichos sin comprobación posible, medias verdades o de plano, mentiras duras y burdas. Según SPIN, Taller de Comunicación Política, hasta el 15 de julio, en 409 mañaneras realizadas a esa fecha, había hecho 4 mil 827 promesas, 2 mil 598 compromisos y 20 mil 715 afirmaciones incomprobables. Además, había pronunciado mil 563 mentiras. Un promedio de cuatro diarias dichas por un presidente que promete un día sí y otro también, no mentir.
El informe presentado ayer sigue la misma tónica. El tratamiento dado a los temas tenía dos partes. El primero —que es la nota característica más evidente de este segundo informe— consistía en evadir casi por completo la realidad y cuando le era imposible no referirse a ella, la suavizó y minimizó al extremo. La segunda parte del tratamiento de los problemas consistía en enumerar las acciones las del gobierno para enfrentar las crisis, mediante las afirmaciones incomprobables o mentiras.
Fecha: 2-sept.-20
Autor: Guillermo Valdés Castellanos
Medio: Milenio
https://www.milenio.com/opinion/guillermo-valdes-castellanos/doble-mirada/la-evasion
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